Cómo hacer tu propio baño de harina de avena
Unos pocos ingredientes simples es todo lo que necesitas para calmar tu piel.
Darle a tu hijo un baño de harina de avena es una solución simple, eficaz y barata para una variedad de afecciones pediátricas de la piel. Se puede utilizar para todo, desde calmar el dolor de la erupción del pañal a la hidratación de la piel seca y el alivio del eczema. Esto no sólo es bueno para los niños, puedes utilizarlo tú mismo si tienes problemas de piel seca o picazón. Puedes hacer tu propio baño de avena en casa por menos de un dólar, utilizando ingredientes que probablemente ya tienes en tu cocina.
Ingredientes que necesitarás para hacer tu baño de harina de avena
- Licuadora, procesador de alimentos o molinillo de café.
- Agua tibia
- 1 taza de avena o 1/3 de taza para los bebés.
- Si encuentras que no puedes moler la harina de avena lo suficientemente fina, es posible que desees utilizar una bolsa de muselina, gasa, o panty en el baño.
Pasos para hacer el baño de avena
- Mezcla o procesa la avena en la velocidad más alta de tu procesador de alimentos, licuadora o molinillo de café hasta que se vuelva un polvo muy fino y consistente.
- Prueba una cucharada de la avena molida para ver si está molida lo suficiente como para absorber el agua. Revuelve una cucharada de la avena molida en un vaso de agua tibia.
- Si la avena se absorbe fácilmente en el agua, convirtiendo el líquido en una sustancia de aspecto lechoso con un tacto sedoso, se ha mezclado lo suficiente.
- Si el líquido no se vuelve lechoso, sigue procesando la avena para molerla aún más fino. Prueba de nuevo. Repite hasta obtener una solución lechosa con un tacto sedoso.
Cómo realizar el baño de avena
Vierte la harina de avena casera en una tina con agua tibia y revuelve el agua con la mano varias veces para crear una distribución uniforme. Busca a lo largo de la parte inferior de la bañera los grumos y rompe cualquiera que encuentre. Permite que tu hijo se sumerja en la bañera durante 15 a 20 minutos. Puedes incluso desear frotarlo suavemente con la harina de avena directamente sobre la piel.
Si usas una bolsa para contener la avena, coloca la bolsa en un baño caliente, mientras que el agua se enfría a una temperatura adecuada para tu hijo.
Ten cuidado al transportar a tu pequeño dentro y fuera del baño. La harina de avena hará a la bañera aún más resbaladiza de lo habitual. Seca la piel de tu hijo con una toalla suave. El baño de avena puede ser realizado una o dos veces al día, o con más frecuencia si tu pediatra aconseja hacerlo.
Condiciones de la piel que se benefician de la harina de avena
Los padres y los doctores han recurrido a los poderes relajantes de la harina de avena durante siglos. No es sorprendente, entonces, que la harina de avena figure entre los ingredientes en una serie de productos para la piel, cremas hidratantes y jabones (para niños y adultos).
Estas son sólo algunas de las condiciones de la piel más comunes que se pueden tratar con un baño de avena.
- Picazón anal (a menudo por gusanos)
- Acné del bebé
- Varicela
- Erupción de pañal
- Piel seca
- Eczema
- Picaduras de insectos
- Herpes
- Quemaduras solares
Ahora que has dominado el uso de la avena para aliviar disímiles condiciones de la piel en tu hijo, no dudes en probarlo en ti mismo. Habla con tu médico si todavía no te lo ha sugerido.
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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: agosto 17, 2017.
