Calabaza y Diabetes Tipo 2: Beneficios y Puntos a Considerar

La mayoría de nosotros típicamente utilizamos las calabazas en épocas muy específicas del año, talladas con caras divertidas en los porches en Halloween, y convertidas en pastel de calabaza súper dulce en Navidad o Acción de Gracias.

¡Esto es una lástima, porque este vegetal de vivos colores tiene mucho más para ofrecer!

La calabaza viene en diferentes variedades de colores y está llena de vitaminas y antioxidantes, y es un gran sustituto de otros ingredientes en muchas recetas.

La calabaza no es un alimento súper bajo en carbohidratos, pero no es tan rico en almidón como algunos vegetales, por lo que tiene un lugar en una dieta saludable para diabéticos (con moderación). En la información a continuación, discutiremos los detalles de cómo, cuándo y por qué incorporar esta superestrella nutricional amarilla en nuestras comidas.

Datos nutricionales de la calabaza

• La calabaza contiene una cantidad moderada de carbohidratos, hay 7.5 gramos en una taza de calabaza en cubos.
• Es relativamente alto en fibra: hay 3 gramos en una taza.
• ¡Es bajo en calorías, una taza nos dará 30 calorías!
• La calabaza contiene cantidades moderadas de hierro, magnesio, zinc y fósforo.
• Su alto contenido de potasio lo convierte en una gran opción para aquellos que buscan reducir su presión arterial y / o obtener algunos electrolitos adicionales.
• Su hermoso color naranja proviene del antioxidante betacaroteno.
• La calabaza también contiene otros antioxidantes, incluidas las vitaminas A y E.
• La calabaza tiene un índice glucémico moderadamente alto de 75.

Beneficios de la calabaza

Potasio: este electrolito puede disminuir la presión arterial, especialmente en personas que ya tienen presión arterial alta. Una taza de calabaza enlatada nos dará el 11% de nuestra cantidad diaria recomendada (RDA).

Betacaroteno: este antioxidante se convierte en vitamina A en el cuerpo. Es excelente para mantener nuestro sistema inmunológico fuerte y nuestra piel y ojos sanos, y puede reducir el riesgo de cáncer de próstata.

Vitaminas C y E: estos antioxidantes pueden proteger nuestra visión y prevenir la enfermedad de Alzheimer.

Fibra: el alto contenido de fibra de la calabaza significa que puede ayudarnos a mantenernos más llenos por más tiempo.

Estudios sobre la calabaza

Tanto las semillas de calabaza como la calabaza contienen una variedad de compuestos que tienen efectos hipoglucémicos (disminución de azúcar en la sangre). Las semillas en particular (que hacen una gran merienda) pueden ser útiles para controlar el azúcar en la sangre en personas con diabetes (Ver; Beneficios de las semillas de calabaza para controlar la diabetes tipo 2). Del mismo modo, también se ha demostrado que la pasta de calabaza es hipoglucemiante. Y puede ralentizar la acumulación de triglicéridos y la progresión general de la diabetes.

En estudios en animales, se ha encontrado que un polisacárido en la calabaza ayuda a controlar el azúcar en la sangre y los niveles de lípidos. Y también se ha encontrado que el polvo de semilla de calabaza aumenta la actividad antioxidante.

La calabaza contiene fitoquímicos y antioxidantes fenólicos que tienen el potencial de reducir tanto la presión arterial alta como las complicaciones causadas por la hiperglucemia.

El aceite de semilla de calabaza virgen es otro subproducto de calabaza realmente sorprendente. Con altas propiedades antiinflamatorias, se ha demostrado que reduce la enfermedad del hígado graso no alcohólico y el desarrollo de arteriosclerosis (el endurecimiento y el estrechamiento de las arterias) y, por lo tanto, puede reducir nuestro riesgo de enfermedad cardíaca.

Finalmente, el alto contenido de Fito estrógenos de las semillas de calabaza puede ayudarlos a prevenir y / o tratar el cáncer de seno.

Puntos a considerar

Si somos propensos a la hipoglucemia, probablemente sea mejor evitar comer calabaza debido a sus propiedades hipoglucémicas. Del mismo modo, si tenemos una presión arterial extremadamente baja, la calabaza la puede disminuir aún más. Y debemos recordar que la calabaza no es un alimento súper bajo en carbohidratos, así que no debemos exagerar o veremos aumentar nuestros niveles de azúcar en la sangre.

Cocinar la calabaza

Selección. Al elegir una calabaza para comer, debemos buscar cosas muy diferentes de las que podríamos enfocarnos cuando elijamos una para tallar para Halloween. Las mejores calabazas para cocinar a menudo se llaman “calabazas de pastel”, “calabazas dulces” o “calabazas de azúcar”. Estas son mucho más pequeñas que nuestra típica calabaza de Halloween, con menos pulpa acuosa.

Seleccione calabazas que tengan una a dos pulgadas de tallo: tallos más pequeños significan que la calabaza ya puede estar pudriéndose o a punto de pudrirse. La apariencia importa aquí: evita las calabazas con hematomas o imperfecciones.

Si estamos comiendo calabaza enlatada, tenemos que elegir variedades sin endulzar; mantenernos alejados del relleno de pastel de calabaza azucarado. Y buscar marcas que no tengan ningún aditivo.

Guardado. Las calabazas enteras y sin cortar se pueden guardar en nuestra despensa o en el armario durante varios meses, pero debemos asegurarnos de guardarlas de lado para que no caiga la humedad y no se siente cerca del tallo y pudra la calabaza.

El puré de calabaza cruda que hemos quitado de la calabaza se puede refrigerar en un recipiente hermético por hasta tres días. Si está cocinado o si proviene de una lata, puede durar hasta siete días en la nevera.

Congelar nuestra calabaza en una bolsa de congelador sellada o en un recipiente hermético por hasta ocho meses es otra opción rápida y fácil.

Usos. La calabaza es una adición fantástica a las sopas y guisos, y es una sustitución baja en carbohidratos para las papas en cualquier plato. La calabaza también es una gran adición a las ensaladas y se puede hornear y comer caliente o fría. Las semillas de calabaza son un complemento perfecto para la ensalada y / o una adición a comida horneada saludables. ¡También se puede usar como sustituto de ingredientes como aceite o mantequilla en cualquier producto horneado!

Cocinar la calabaza. Corte la calabaza en trozos grandes y cubra con una pequeña cantidad de agua (alrededor de una taza). Hierva por unos 20 minutos, o al vapor por 10 a 15 minutos.

Las calabazas también se pueden cortar por la mitad y hornear en el horno durante aproximadamente una hora. O cortar en trozos también servirá para hornear en el horno. Una vez que la calabaza está cocida, podemos convertirla fácilmente en puré utilizando un procesador de alimentos o una batidora de mano.

Técnicas para cortarla. Cortar con cuidado el tallo de la calabaza y cortar la calabaza por la mitad con un cuchillo afilado. Sacamos el relleno y quitamos las semillas; y guardamos las semillas si estamos planeando usarlas.

Ver además; 50+ Remedios Caseros para la Diabetes y Bajar el Azúcar en Sangre.

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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: febrero 2, 2018.