8 remedios naturales para impulsar la función de la tiroides
La glándula tiroides tiene un gran impacto en cada célula , órgano y tejido de nuestro cuerpo, ya que regula procesos tan importantes como la temperatura, el peso corporal, la frecuencia cardíaca, la tasa metabólica y la producción de energía. Aunque es un órgano muy pequeño, la función óptima de la tiroides es vital para tu salud y bienestar general.
Existen dos trastornos fundamentales asociados al funcionamiento de la tiroides, el hipotiroidismo (niveles insuficientes de la hormona tiroidea) y el hipertiroidismo (niveles elevados de la hormona tiroidea). El riesgo de padecer una disfunción tiroidea aumenta con la edad, y las mujeres tienen más probabilidades de desarrollarla que los hombres. Las causas comunes de trastornos en la función de la tiroides son la radiación y exposición a metales pesados, las intolerancias alimentarias y los desequilibrios hormonales.
En este artículo vamos a enfocarnos en cómo impulsar su funcionamiento de forma natural, es decir en cómo hacer frente al hipotiroidismo y a sus efectos en nuestro organismo.
Síntomas del hipotiroidismo
Los síntomas pueden ser vagos y a menudo pasan desapercibidos para muchos médicos. Entre los más comunes o apreciables se encuentran la fatiga extrema, la depresión, los cambios de humor, dolores de cabeza, mareos, piel muy seca, estreñimiento, menstruación abundante o irregular, problemas de memoria, temblores en las extremidades y sensibilidad al frío.
Remedios naturales y consejos para impulsar la función de la tiroides
Mantener una dieta sana, rica en alimentos proteicos. Como regla general de alimentación se recomiensa reducir o eliminar la cafeína, el azúcar, los edulcorantes artificiales, los alimentos procesados, los carbohidratos y granos refinados. Pero igual de importante es incrementar el consumo de alimentos favorables, por ejemplo fuentes saludables de proteínas y grasas como las nueces, las semillas, el aguacate, el aceite de coco, la mantequilla de nueces, la quinua, las legumbres, las carnes orgánicas y los pescados. Las proteínas ayudan a que tu cuerpo transporte mejor la hormona tiroidea a todos los órganos y tejidos.
Equilibra los niveles de estrógeno. En presencia de demasiado estrógeno, disminuye la función de la glándula tiroides. Se recomienda evitar el uso de medicamentos anticonceptivos, el consumo de productos de soja (contienen fitoestrógenos) y de carnes no orgánicas (la hormona de crecimiento presente en muchas carnes puede causar desequilibrios hormonales), reducir el consumo de lácteos y aumentar el consumo de fibra.
Evitar las deficiencias de vitaminas y nutrientes. Aunque las deficiencias de vitaminas y nutrientes no son la causa del hipotiroidismo, la carencia de algunos nutrientes esenciales puede empeorar los síntomas o incluso, desactivar los sistemas de recuperación del cuerpo. (Te puede interesar: Las mejores vitaminas para las mujeres)
Garantizar niveles adecuados de yodo. Tu organismo necesita yodo para mantener la buena función de la tiroides. El yodo se puede encontrar de forma natural en los peces, los mariscos, el krill, las algas, los huevos, la acelga, los espárragos, las judías, las setas, las semillas de sésamo, el ajo. Si deseeas tomar un suplemento de yodo, primero debes consultarlo con tu médico.
Obtén vitamina D. Asegúrate de exponerte al sol de forma regular para producir más vitamina D, siempre en horarios de menor radiación ultravioleta. Los niveles normales de vitamina D se encuentran entre 50-80 ng/ml. Cualquier valor por debajo de 32ng/ml puede causar alteraciones hormonales.
Consume ácidos grasos omega-3 y otras grasas saludables. Los ácidos grasos omega-3 son un componente básico de las hormonas que controlan el crecimiento, la función inmune y ayudan a tener una glándula tiroides sana. Estos ácidos grasos se pueden encontrar en pescados como la sardina, la caballa, el salmón y el atún, en las semillas y las nueces, los huevos, los aceites de linaza y de oliva, entre muchos otros. (Ver: 5 razones por las que debes consumir más ácidos grasos Omega 3)
Los aceites hidrogenados o procesados deben ser evitados en todo momento, ya que interfieren con la producción de la hormona tiroidea.
Incrementa el consumo de glutatión. Este es un poderoso antioxidante que fortalece el sistema inmunológico, que protege y sana al tejido tiroideo. Los alimentos que aumentan el glutatión son los espárragos, los melocotones, el aguacate, las espinacas, el ajo, la calabaza, los huevos y el pomelo.
Otras vitaminas y nutrientes importantes para impulsar la función de la tiroides son el selenio, el hierro, el zinc, el cobre y la vitamina A y B12.
Considera el consumo de probióticos. Algunos estudios vinculan los problemas del sistema inmunológico y el mal funcionamiento de la tiroides, con el sistema digestivo. Mantener una flora intestinal saludable es muy importante para las personas que tienen hipotiroidismo. Así que incrementa tu consumo de alimentos ricos en probióticos o considera el uso de un suplemento. (Te puede interesar: 9 razones por las que debes consumir alimentos probióticos)
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Artículo publicado por: Sandra Fernández Alonso. Última revisión: mayo 27, 2019.
